Se cumple ya un año desde el estallido de la pandemia del COVID-19. En este tiempo, la Diputación de Badajoz ha tenido que hacer un ejercicio de adaptación a las nuevas circunstancias para dar respuesta a las necesidades de su personal y de la ciudadanía. Desde la declaración nacional del estado de alarma adaptó sus procesos para que los puestos que no fueran críticos pudiera prestarse en modalidad a distancia, creando protocolos específicos, adaptando procedimientos y medios de trabajo.
Paralelamente, consciente de que las secuelas afectivas y psicosociales derivadas del confinamiento y de la crisis suponían un reto especialmente complicado para la salud mental, no solo para las personas con dificultades previas sino para la población en general, la institución provincial implementó medidas de apoyo psicológico como cursos de resiliencia, sesiones de mindfulness, foro de recursos psicosociales y sanitarios, así como un servicio de asistencia psicológica y acompañamiento personalizado para el personal interno.
El material divulgativo se puso también a disposición pública a través de la web de la Diputación a fin de contribuir a cuidar la salud emocional de cualquier persona interesada. Las fichas publicadas daban recomendaciones para reconocer o gestionar las emociones ante la adversidad, presentando pautas para afrontar el estrés, el desasosiego o la incertidumbre, para sobrellevar la enfermedad, el confinamiento, la soledad y el duelo, ofreciendo también orientaciones especiales para la atención a la niñez, juventud y mayores.
Superado el impacto inicial del estado de alarma, la Diputación de Badajoz continúa su voluntad de cuidar la salud integral de su equipo. En el programa provincial de prevención establecido este año para sus trabajadores/as se atiende tanto a la parte física como a la emocional, con el objetivo particular de cuidar y entrenar la salud mental de manera proactiva, para cuidar del personal no solo como profesional sino como persona.
Con las campañas incluidas en el Plan de Acción a desarrollar en 2021 por el Área de Recursos Humanos y Régimen Interior, a través del Servicio de Prevención de Riesgos y Salud Laboral y de su Departamento de Prevención y Gestión de Conflictos, en colaboración con la Mutua FREMAP, se quiere convertir la Diputación de Badajoz en un ejemplo de organización saludable y socialmente responsable. Durante el mes de abril se tratará tanto el bienestar psicoemocional como la adaptación al cambio.
Con este programa se contribuye a varios de los objetivos incluidos en la Agenda 2030 de Naciones Unidas: Salud y bienestar, como son el trabajo decente y crecimiento económico y las alianzas para lograr objetivos.
