La portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, ha mostrado "evidentemente preocupación" por las observaciones del Tribunal de Cuentas sobre contratación en la Administración pública autonómica correspondiente a 2014, año en el que gobernaba el 'popular' José Antonio Monago en la región.
Ha incidido también en que a tenor de dicho informe la Junta anota las citadas observaciones "para no volver a hacer lo que no se debe hacer" y que, según ha indicado aludiendo a las observaciones del citado Tribunal de Cuentas, se refería a "presupuestar ingresos ficticios y no hacer frente a los gastos" en 2014, época de gobierno del PP en la comunidad.
"Miramos y leemos con preocupación y también anotamos para no volver a hacer lo que no se debe hacer, es decir, presupuestar ingresos ficticios y no hacer frente a los gastos, que era lo que nos está diciendo que hizo el presidente del PP y el Gobex, que tantas lecciones de buen hacer nos dieron en la pasada legislatura", ha dicho Gil Rosiña a preguntas de los medios sobre la cuestión en rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno autonómico de este martes en Mérida (Badajoz).
En todo caso, ha subrayado que el actual Ejecutivo regional del PSOE mira "al futuro con esperanza". "Este gobierno nada más que llegó se puso a trabajar con lo que decía la Airef, con lo que exigía el Gobierno de España y Bruselas, e intentar ordenar las cuentas de la Junta de Extremadura, que es lo que hemos hecho, sin desordenar la vida de los extremeños, y además diciendo la verdad", ha sentenciado.
Al respecto, ha apuntado que "no es fácil ir probablemente a la Asamblea de Extremadura con un presupuesto (regional) que no crece, pero ésa es decirle la verdad a los extremeños y también a los responsables políticos y tener la capacidad y la inteligencia política de negociarlos, sacarlo adelante y sacar adelante los proyectos y las decisiones que mejoren la vida de los ciudadanos en la comunidad autónoma".
